Lilith: La Fuerza Indomable de la Libertad Femenina

Desde las sombras de los antiguos mitos hasta los altares modernos, Lilith resurge una y otra vez, feroz y libre. No pide permiso. No se doblega. Su historia ha sido tergiversada, temida y silenciada, pero para quienes caminamos el sendero del alma, ella representa el grito ancestral que habita dentro de cada mujer que ha sido domesticada, callada o reducida a moldes que no le pertenecen.

Lilith fue la primera mujer, antes de Eva. No fue creada de una costilla, sino del mismo barro que Adán. Y cuando él intentó dominarla, ella eligió el exilio antes que la sumisión. Se convirtió en un símbolo de la rebeldía sagrada, del deseo propio, de la voz que dice “no” sin culpa. En ella habita el poder de quien no teme quedarse sola si eso significa ser fiel a sí misma.

Trabajar con Lilith es un acto de valentía. No es una energía suave ni complaciente; es honesta y transformadora. Invocarla es mirarte al espejo sin filtros, aceptar tu sombra y amarla. Es permitirte sentir rabia, placer, tristeza o poder sin disfrazarlos para ser aceptada. Lilith me ha enseñado que no hay espiritualidad verdadera sin autenticidad, y que lo salvaje no es algo que debamos reprimir, sino recordar.

Mis rituales con ella suelen nacer en noches sin luna, cuando todo parece estar en silencio, pero el alma grita. Enciendo una vela negra o roja y coloco una obsidiana frente a mí. Dejo que las palabras fluyan, a veces como mantras, a veces como gritos. Le hablo de mis miedos, de las veces que me traicioné por agradar, de los límites que aún no me atrevo a poner. Y ella responde. No con caricias, sino con fuego interno.

Lilith no busca que seas perfecta, solo que seas tú. Entera. Completa. Con tus luces y tus sombras. Nos recuerda que el cuerpo es templo, que el deseo es divino, que la libertad no se negocia.

Hoy, cada vez que me permito ocupar espacio sin disculpas, cada vez que digo lo que pienso, cada vez que elijo mi placer y no la complacencia… sé que Lilith está sonriendo.

"Nunca apagues tu fuego por encajar en moldes ajenos. Sé salvaje, sé libre, sé tú."

Te amo. La Crow